La pregunta importante que surge respecto a la política del Banco Central es hasta cuándo estará en pausa el ajuste monetario.
El resultado del plebiscito debería tener un impacto positivo en los mercados, bajo el supuesto de una menor incertidumbre y primas de riesgo en el futuro debido a la expectativa de una nueva constitución más moderada.
La economía chilena se encuentra en tal nivel de desajuste, que su actuar no puede ser el acostumbrado a este tipo de situaciones.
Por cuarta vez consecutiva el Banco Central realiza una modificación del sesgo del comunicado, repitiendo la situación de marzo y mayo: un sesgo que indicaba una pronta finalización del ciclo de alzas, para luego eliminar aquello y subir la tasa más de lo esperado
La variación interanual alcanzaría 12,7%, lamentablemente para aquellos que esperan que la inflación ceda un poco los próximos meses
El Consejo del Banco Central optó por no sorprender a los agentes, lo que es bastante informativo respecto al ciclo de alzas futuras
La gran pregunta es: ¿debería el Banco Central dar pie atrás a lo indicado en el IPoM y continuar con los agresivos aumentos de TPM?