Perú ha vivido importantes crisis políticas en las últimas décadas, pero la marcha de su #economía ha mostrado una resiliencia fuera de lo común. Las inversiones, el desarrollo de negocios y el crecimiento han seguido por un carril distinto al de las idas y venidas políticas. La reciente crisis que se manifestó con tres presidentes distintos en una sola semana a mediados de noviembre hizo temer a muchos analistas que esta paradoja podría llegar a su fin. Pues parece que no, si vemos el interés con el que los inversionistas internacionales acudieron a la emisión de un bono por US$4.000 millones en el mercado internacional el 23 de noviembre.

Según el director general del Tesoro Público, José Olivares, la demanda más que triplicó la oferta, llegando a US$15.000 millones. La emisión incluye un tramo de US$1.000 millones con vencimiento a 101 años.

Los inversionistas siguen confiando en una macroeconomía sólida que se ha respectado desde los 90. NI la #inflación, ni el endeudamiento ni el déficit son tema de preocupación. Es una economía abierta al mundo, con libertad de mercado, con un estado que en general no se entromete mucho. FYNSA opera en el mercado peruano a través de su filial #FYNSAPerú.